26 de enero de 2019

Chang'e 4: la Misión China que Reveló el "Lado Oscuro" de Nuestra Luna.



El pasado jueves 3 de enero, China anunció haber logrado por primera vez en la historia el alunizaje exitoso de una sonda sobre la cara oculta de la Luna, según informó la Administración Nacional del Espacio de China (ANEC).

La agencia, citada por la agencia oficial de noticias Xinhua, indicó que el hito protagonizado por la nave no tripulada Chang'e-4 tuvo lugar en la cuenca de Aitken, en el polo sur del satélite de la Tierra, a las 10:26 hora de China (02:26 hora global)


Representación artística del momento en que la sonda Chang'e-4 aluniza.

La sonda, que incluye un módulo y un vehículo explorador, transporta instrumentos para estudiar la geología de la zona, así como semillas de papa y plantas para que crezcan en la Luna a modo de experimento biológico.

A pocas horas de su alunizaje, la misión envió ya las primeras imágenes tomadas desde la superficie del satélite.



LA SONDA

Lanzamiento de la sonda Chang'e-4 el 7 de diciembre de 2018.

“Chang’e-4”, que había sido lanzada el 7 de diciembre de 2018 por un cohete Larga Marcha 3B, incorpora un orbitador, un módulo de aterrizador robótico y un rover. Es el segundo módulo lunar y explorador lunar de China. Se construyó como copia de seguridad de la Chang'e 3, como Chang'e 2 fue igualmente para Chang'e 1. Tras el exitoso aterrizaje de la misión Chang'e 3, la configuración de Chang'e 4 va equipada para cumplir nuevos objetivos científicos. Al igual que sus predecesores, la nave espacial lleva el nombre de la diosa de la Luna china.


Gráfico del aterrizador de la sonda Chang'e-4.

El mismo día del alunizaje, y solo unas horas después de que se produjera, la Administración Espacial Nacional China anunció que el nombre elegido para el rover es Yutu-2 (Conejo de Jade 2) siguiendo la lógica nomenclatura de su predecesor, el rover Yutu desplegado por la Chang'e 3. Al igual que en la ocasión anterior, se realizó una encuesta popular para escoger su nombre, pero en la ronda final, la decisión fue tomada por un comité especial designado por la agencia.



LA MISIÓN

Infografía de la misión Chang'e-4.

La misión estaba programada para ser lanzada en el año 2015 formando parte de la segunda fase del Programa Chino de Exploración Lunar,​ pero por tener objetivos tan ajustados y estar retrasado el diseño de la misión, hubo que aplazarla hasta el pasado 7 de diciembre.
La Administración Espacial Nacional China (CNSA) lanzó el 21 de mayo de 2018 el satélite de retransmisión de comunicaciones Queqiao al punto L2 como una estación de retransmisión de comunicaciones para transmitir las señales entre el módulo de aterrizaje/rover y la estación de la
Tierra.​


Satelite Queqiao previo a su lanzamiento.

Al no haber un enlace de comunicaciones directo, todas las imágenes y los datos se envían primero a este satélite  y luego se transmiten desde allí a la Tierra. Las comunicaciones con la sonda se realizan desde la Estación del Espacio Lejano.

La misión, además de analizar los datos de la superficie lunar, también incluirá otros experimentos científicos. Chang'e 4 lleva a bordo huevos de gusano de seda, semillas de patata y de flores para observar la germinación, crecimiento y respiración en las condiciones de baja gravedad de la superficie lunar.


Imagen satelital del cráter Von Karman, lugar de alunizaje de la sonda Chang'e-4.

El módulo de aterrizaje de Chang'e-4 lleva dos cámaras con las que se podrán realizar observaciones de radioastronomía de baja frecuencia. Asimismo, transporta un contenedor de 3 kg con semillas de papa y plantas arabidopsis, así como huevos de gusano de seda para realizar estudios biológicos.

El rover también cuenta con una cámara panorámica, un radar para sondear debajo de la superficie lunar, un espectrómetro de imágenes para identificar minerales y un experimento para examinar la interacción del viento solar con la superficie lunar.



INSTRUMENTOS

Mientras que el orbitador facilitará las retransmisiones de comunicación,​ el módulo de aterrizaje y el rover llevarán a cabo experimentos científicos para estudiar la geofísica en la zona de aterrizaje, con una capacidad de análisis químico muy limitada. Además, Chang'e 4 también transportará material internacional originario de Suecia, Alemania, los Países Bajos y Arabia Saudita.


Instrumentos de la sonda Chang'e-4.

Según precisó en agosto el responsable del programa de exploración lunar chino, Wu Weiren, en este caso el vehículo espacial se ha diseñado con una "mayor adaptabilidad" a los terrenos abruptos. El artefacto, según Wu, es "el más ligero del mundo de su tipo", con 140 kilos de peso. Aunque se había anunciado que su nombre se decidiría por votación popular en octubre, hasta el momento no se ha hecho público el apodo con el que se conocerá a este vehículo. Sí se ha dado a conocer que tiene seis ruedas y está dotado de una cámara panorámica, radar y un espectrómetro de imágenes infrarrojas, entre otros equipos.
La nave espacial, a su vez, cuenta también con cámaras para grabar el alunizaje y las imágenes del terreno, y un espectrómetro de baja frecuencia.


Fotografía de Yuty-2, rover/aterrizador de la sonda Chang'e-4.

La nave es hermana de la Chang'e 3, que en 2013 aterrizó en la cara visible de la Luna con el explorador lunar Yutu a bordo. La misión se consideró un éxito aunque Yutu (que significa liebre de jade en mandarín) apenas logró recorrer 110 metros antes de que sus sistemas fallaran sin reparación posible.


MISIÓN QUE HACE HISTORIA

Fotografía de la superficie lunar tomada por Chang'e-4 antes de su alunizaje.

Si bien misiones anteriores estuvieron dirigidas hacia el lado de la Luna orientado hacia la Tierra, esta es la primera vez que una nave desciende sobre la cara oculta.
El diario oficial Global Times calificó el logro como un "gran hito de la exploración del espacio".

Programas espaciales como el soviético o el estadounidense ya lograron hace más de medio siglo fotografiar la cara oculta de la Luna pero nunca alunizaron allí, pese a que en 1962 una misión no tripulada estadounidense lo intentó sin éxito, destaca la agencia Efe.


Fotografía del suelo lunar tomada por Chang'e-4 luego de alunizar.

El principal objetivo de la sonda Chang'e 4 es analizar la composición del terreno y el relieve de la zona, lo que podría dar pistas sobre los orígenes y evolución del satélite. Esa cara lunar, invisible desde la Tierra, es muy distinta de la que conocemos. Si la cara vista muestra mares llanos de basalto y relativamente pocos cráteres, el otro lado está lleno de estos y su composición parece diferente. La misión china podría recabar datos sobre la evolución y la geología de esta área desconocida del satélite.


Fueron las primeras fotografías enviadas a la Tierra por la sonda Chang'e-4. 



EL LADO OSCURO

La cara oculta de la Luna no puede verse nunca desde la Tierra debido a un fenómeno conocido como "rotación sincrónica", ya que nuestro satélite tarda tanto en girar sobre su propio eje como en completar una órbita de la Tierra.

Por este motivo, esta cara es también conocida como "lado oscuro", pese a que sí es iluminada por el Sol y experimenta igualmente tanto el día como la noche.


Fotografía donde se muestran las dos caras de la Luna (desde nuestra perspectiva). A la izquierda, el lado visible desde la Tierra; a la derecha, el denominado "lado oscuro".

Otro de los objetivos de la misión Chang'e-4 es explorar el cráter Von Kármán ubicado en la cuenca de Aitken en el polo sur de la Luna, la cual se estima que probablemente se formó por el impacto de un asteroide gigante hace miles de millones de años.
Se cree que el responsable de formar esta cuenca fue tan poderoso que atravesó la corteza exterior del satélite y llegó hasta el manto lunar. Los científicos quieren estudiar cualquier roca del manto que estuviera expuesta a dicho impacto.


Fotografía de la superficie lunar tomada por Chang'e-4 durante su descenso.

Los investigadores también esperan estudiar partes de la lámina de roca fundida que habría llenado la cuenca, permitiéndoles identificar variaciones en su composición.
Uno más de los objetivos es estudiar el regolito de la cara oculta de la Luna: las rocas y el polvo que forman la superficie del satélite.



PANORAMA

El viernes 11 de enero, 8 días después del alunizaje, la sonda Chang’e-4 enviaba a la Tierra una foto panorámica de 360 grados de la zona del lado oscuro de la Luna en que descendió, la cual no tardó en darle la vuelta al mundo.


Fotografía 360° tomada por la sonda Chang'e-4 del Cráter Von Karman.

Las fotografías fueron captadas con una cámara ubicada en la parte superior del módulo de aterrizaje y se transmitieron a la Tierra por el satélite artificial Queqiao, que se encuentra a 455 mil kilómetros de distancia.

En las imágenes es posible observar una superficie gris y rocosa con numerosos cráteres.

Al respecto, Li Chunlai, subdirector de los Observatorios Astronómicos Nacionales de China, dijo: “Desde el panorama, podemos ver que la sonda está rodeada por muchos cráteres pequeños”.
Tan sólo uno de los más cercanos tiene un diámetro de 20 metros y una profundidad de unos cuatro metros.





Hasta el momento, los científicos han realizado un análisis preliminar sobre los terrenos que rodean la sonda, de acuerdo con las imágenes panorámicas.


EL FUTURO

Fotografía del vehículo rover Yutu 2 iniciando su exploración lunar.

En la nueva carrera por la exploración lunar participan las seis agencias espaciales del mundo (las de Estados Unidos, Rusia, Europa, Japón, China e India). Hace casi medio siglo que las misiones Apolo pusieron a Neil Armstrong en la superficie de nuestro satélite. Las muestras que se obtienen son un tesoro científico para entender el origen del sistema solar y los principios generales de la formación de los planetas.

El año próximo China tiene previsto enviar una nueva sonda a la Luna, Chang'e 5, que tendrá como misión recoger muestras del suelo y traerlas de regreso a la Tierra.


Representación artística del explorador Yutu 2 recorriendo la superficie de la Luna.

El programa espacial chino ha logrado enormes progresos en la última década. Aún está muy por detrás en cuanto a tecnología y presupuesto respecto al de Estados Unidos: se calcula que está dotado con 6.000 millones de dólares, frente a los 40.000 de la agencia espacial estadounidense. Pero cuenta con la ventaja de recibir el respaldo inequívoco del gobierno chino. Encaja perfectamente en la estrategia de crecimiento económico que se ha fijado Pekín, que quiere primar la innovación y el desarrollo tecnológico; contribuye a su seguridad nacional y, por añadidura, sirve como herramienta diplomática y de soft power.


Una de las ruedas de Yutu 2 antes de comenzar a recorrer la Luna.

Si ya ha dado los primeros pasos para construir una estación espacial, la Tiangong-3, que se espera que pueda estar lista para 2022, para 2030 China se plantea enviar una misión tripulada a la Luna, un objetivo al que Estados Unidos renunció con el fin del programa Apolo.

China comenzó relativamente tarde en lo que respecta a la exploración espacial. No fue hasta 2003 que envió a su primer astronauta a la órbita, convirtiéndose en el tercer país en hacerlo después de la Unión Soviética y Estados Unidos.


Fotografía del rover Yutu 2 en los laboratorios de la Agencia Espacial China, antes de su lanzamiento.

El programa Chang'e (nombrado así en honor a una diosa que, según leyendas chinas, vive en la Luna) comenzó con el lanzamiento de una primera sonda orbital en 2007, y desde entonces se han lanzado al satélite de la Tierra cuatro aparatos más.


El objetivo a largo plazo del programa es una misión tripulada a la Luna, aunque no se ha fijado fecha para ello y algunos expertos no consideran que sea posible antes del año 2036.






Referencias:



24 de enero de 2019

El Eclipse Total de Luna 2019 en Imágenes


El pasado 21 de enero en la madrugada ocurrió el gran eclipse de Total de Luna, conocido popularmente como Luna Roja (fenómeno que no tiene relación alguna con profecías, malos augurios o algún cataclismo), y que pudo ser visto en gran parte del mundo.

Fue el primer gran evento astronómico de 2019, y no volveremos a ver un eclipse de este tipo hasta el año 2022. En mayo de 2021 habrá otro eclipse total de Luna, pero de mucha menor magnitud.


Entre tanto, Galaxia Bogotá les trae esta pequeña recopilación de las mejores imágenes que dejó el Eclipse de Luna del pasado domingo.


Aficionados observando el Eclipse de Luna en Viena, Austria. (Foto de Lisi Niesner)






Eclipse Lunarde detrás del Monumento a la Carta Magna y Las Cuatro Regiones Argentinas, Buenos Aires, Argentina (Imagen de Natacha Pisarenko).


Eclipse detrás del monumento “Memorial JK", Brasilia, Brasil. (Foto de Eraldo Peres)



Parque del Cincuentenario en Bruselas, Bélgica (Foto de Yves Herman).



Gran Palacio de Bruselas, Bélgica (Foto de Francois Lenoir) .



Encinitas, California, Estados Unidos. (Foto de Mike Blake).



Cristo Redentor, Río de Janeiro, Brasil (Foto de Ricardo Moraes).



Ángel de la Independencia, Ciudad de México (Foto de Alfredo Estrella).



Eclipse de Luna desde Bogotá, Colombia (Foto de Luisa Gonzalez).



Catedral de Colonia, Alemania (Foto de Thilo Schmuelgen).



Estatua de la “Victoria Alada”, Madrid (Foto de Sergio Perez).



Eclipse en Toronto, Ontario, Canadá (Foto de Dan Hamilton-USA TODAY Sports).



 La "Luna Roja" detrás de una iglesia ortodoxa en Turets, Bielorrusia. (Foto de Vasily Fedosenko)



Puente Coronado Bridge, San Diego, California - Estados Unidos (Foto de Mike Blake).



Eclipse desde La Paz, Bolivia (Foto de David Mercado).



 La Luna antes del eclipse en San Diego, California (Foto de Mike Blake).



La Luna detrás del Empire State Building, vista desde Jersey City, Nueva Jersey (Foto de Julio Cortez).



Luna antes del eclipse, Los Angeles, California - Estados Unidos (Foto de Ringo H.W. Chiu).



Praga, República Checa. (Foto de David W Cerny).



Fases del eclipse, Los Ángeles. (Foto de Ringo H.W. Chiu)



Washington, Estados Unidos. (Foto de J. David Ake)


Asimismo, durante este majestuoso evento los astrónomos del Observatorio Griffith, en Los Ángeles, lograron capturar la imagen del momento en que un objeto espacial, presumiblemente la roca de un cometa, impacta en la superficie de la Luna.

Imagen de la Luna, donde puede apreciarse el destello en el momento del impacto como un punto blanco (zona inferior izquierda).

"Al parecer, la roca de un cometa se estrelló contra la Luna durante el eclipse lunar total del domingo por la noche y el lunes en la madrugada", dijo el astrofísico José María Madiedo, de la Universidad de Huelva, España. "Aunque los choques de ese tipo son comunes, es el primer destello por un impacto que se haya visto durante un eclipse lunar".

Imagen amplificada del instante del impacto de la roca con la Luna.

"El objeto se estrelló a una velocidad de 17 kilómetros por segundo. Contaba con un peso de 10 kilogramos y medía unos 30 centímetros de ancho", agregó Madiedo.




Referencias:

20 de enero de 2019

Eclipse Lunar 2019: El Primer Gran Evento Astronómico del Año



Dentro de unas horas, en la madrugada del domingo 20 al lunes 21 de enero, tendrá lugar el primer fenómeno astronómico del año. Se trata de un eclipse lunar total, y además, será el único de esta clase que se dé en el cielo durante el 2019. Supone por lo tanto uno de los eventos celestes más fascinantes para tratar de observar en directo.

Los eclipses lunares se producen cuando nuestro satélite se alinea con la Tierra y el sol, y varían dependiendo de qué manera atraviese la sombra de la Tierra. Como lo que veremos esta madrugada será un eclipse total, esto significa que la luna se verá completamente tapada por la umbra de la Tierra (zona en la que la luz solar queda bloqueada por nuestro planeta).

EL ORÍGEN DEL LÍRICO NOMBRE DEL FENÓMENO

Además, el fenómeno dará lugar a lo que se conoce como superluna de sangre, también llamada con la poética denominación de Luna de Sangre Lobo en referencia a las nociones esotéricas, que cuentan que la luna de enero coincidía con los aullidos de estos animales carnívoros durante las noches invernales en el hemisferio norte.

¿QUÉ SUCEDE DURANTE UN ECLIPSE DE LUNA?

La explicación científica de la transformación lunar, que aparecerá más grande y reluciente e irradiando un halo anaranjado y rojizo, es la siguiente: al producirse la alineación de los tres elementos, la atmósfera de la Tierra filtra la luz azul y verde de los rayos de sol, pero permite pasar la roja, razón por la cual la luna se tiñe con el reflejo del brillo rojo que le llega procedente de la atmósfera.


¿CUANDO SE PRESENTÓ EL MÁS RECIENTE ECLIPSE LUNAR?

La última vez que pudimos disfrutar de un eclipse similar fue tras el atardecer del 27 de julio del año pasado. Este eclipse será más corto y se producirá en un contexto mucho menos propicio que el anterior. Mientras que el eclipse de julio pasado fue en una tarde de verano, esta vez será en la madrugada de un lunes de enero. Pese a que son dos eclipses muy cercanos en el tiempo, no siempre sucede así. 


¿CUÁNDO SERÁ EL PRÓXIMO ECLIPSE DE LUNA?

El próximo eclipse lunar será parcial y sucederá el 16 de julio. Para contemplar un eclipse de similares características tendremos que aguardar nada más y nada menos que hasta mayo de 2022.


HORARIOS Y LUGARES PARA VER EL ECLIPSE:

El bello espectáculo podrá verse en América del Norte, América del Sur y el oeste de Europa y África, y tendrá una duración de 62 minutos. En España, concretamente, será posible contemplarlo entre las 2:33 y las 5:50, estando su apogeo total en torno a las 5:12.

Los horarios para el resto de lugares importantes desde los que será visible la superluna son:

Argentina:  23:36 horas y las 04:48 horas de la madrugada
Chile:         23:36 horas y las 04:48 horas de la madrugada
Uruguay:    23:36 horas y las 04:48 horas de la madrugada
Paraguay:   23:36 horas y las 04:48 horas de la madrugada
Perú:           21:36 horas y las 02:48 horas de la madrugada
Colombia:   21:36 horas y las 02:48 horas de la madrugada
Cuba:          21:36 horas y las 02:48 horas de la madrugada
Estados Unidos (Nueva York):      21:36 horas y las 02:48 horas de la madrugada

México:                                          entre las 9:33 horas y las 0.50 horas





Artículo extraído de as.com
Para ver el artículo original, clic aquí.

16 de enero de 2019

Ultima Thule, el Lejano y Fascinante Astro Desvelado por la Sonda New Horizons



En las primeras horas del 1 de enero, mientras el mundo celebra la llegada del nuevo año, la sonda espacial New Horizons se encontraba a más de 6 mil millones de kilómetros de distancia, continuando su viaje interestelar, y tenía su máximo acercamiento a 2014 MU69, mejor conocido como Ultima Thule, el cual, a las 5:33 a.m., hora global, se convertía en el objeto más lejano de la historia en ser explorado por una nave, hasta la fecha.



Fotografía procesada del objeto 2014MU69, denominado Ultima Thule.

Científicos de la agencia espacial estadounidense señalaron que la sonda se encuentra en una condición "saludable" tras pasar por la roca helada.
Ultima Thule se encuentra a unos 6.500 millones de kilómetros de distancia de la Tierra, más allá del Sistema Solar, en un área denominada Cinturón de Kuiper.


Acercamiento de la sonda New Horizons hacia Ultima Thule durante las primeras horas de 2019.


"¡Adelante New Horizons!", exclamó el científico en jefe Alan Stern a las 05:33 GMT, el momento en el que se suponía que la sonda New Horizons hacía su acercamiento más próximo a Ultima Thule. "Estaría engañándoles, sin embargo, si no les dijera que también estamos en ascuas esperando ver cómo resulta esto", comentó con anterioridad. "Sólo tenemos una oportunidad para esto. Nada parecido se ha logrado antes y, como con cualquier misión como esta, hay riesgos", dijo a los periodistas.

Desde la madrugada del 1 de enero, New Horizons estuvo programada para explorar de cerca el frío y misterioso cuerpo celeste. No obstante, Ultima Thule estaba tan distante que la señal de confirmación tardó horas en llegar.


Primeras fotografías del acercamiento de la sonda New Horizons a Ultima Thule.

Ultima Thule es un término de origen griego usado por geógrafos romanos y medievales para indicar el norte lejano o un lugar "situado más allá del mundo conocido". El término fue elegido por el público en una convocatoria de la NASA para dar nombre al objeto conocido hasta entonces como 2014 MU69 y situado a 6.500 millones de kilómetros de la Tierra.

Este objeto debe su nombre a una isla lejana de la literatura medieval, que “significa ‘más allá de Thule’; es decir, más allá de los límites conocidos de nuestro mundo, lo que simboliza la exploración más allá del cinturón de Kuiper”, contó la agencia espacial en un comunicado.


Infografía que muestra la distancia entre la Tierra y Ultima Thule.

El objeto es parte de una de las regiones más remotas y enigmáticas del Sistema Solar, un anillo de cuerpos helados que orbita el Sol y se conoce como el "Cinturón de Kuiper", en honor al astrónomo que predijo su existencia en la década del 50, Gerard Kuiper.
El anillo contiene restos de la formación de planetas y es un registro fósil del nacimiento del Sistema Solar.
Hal Weaver, científico de la misión, dijo que el diminuto cuerpo de 30 kilómetros de ancho es "probablemente el objeto más primitivo que se haya encontrado una nave, la mejor reliquia posible del Sistema Solar".

Se cree que, como muchos otros objetos del Cinturón de Kuiper, estaría compuesto por polvo y hielo aglomerado durante los inicios del Sistema Solar hace más de 4.500 millones de años.
Teóricamente este objeto tendría una forma elongada, como una batata o cacahuete.


Representación artística del acercamiento de la sonda New Horizons a Ultima Thule.

Y su superficie sería muy oscura, por haber sido "quemado" por radiación de alta energía durante miles de millones de años.
Además, el equipo explicó que los análisis iniciales no han encontrado evidencia de anillos o satélites a más de una milla de diámetro del objeto (a unos 1,6 kilómetros), ni rastro de atmósfera. En cuanto a los aspectos físicos observados, el color de Ultima Thule coincide con el color de mundos similares en el cinturón de Kuiper, y ambas esferas que lo forman son casi idénticas en tonalidad.
Los científicos esperan que Ultima Thule provea pistas sobre la formación de los objetos distantes del Cinturón de Kuiper.


Fotografía del planeta menor Plutón, tomada por New Horizons en julio de 2015.

New Horizons, misma sonda que en julio de 2015 arribó a Plutón y tomó la imagen más clara que se haya tenido de este explaneta, usó por primera vez sus cámaras y detectores para obtener información directa sobre Ultima Thule y comenzó poco después a enviar esa información a la Tierra. Se aproximó al objeto a una velocidad de 14 kilómetros por segundo y su punto de mayor cercanía fue a las 5:33 GMT del martes 1 de enero, según estaba proyectado.


LAS PRIMERAS IMÁGENES

El 1° de enero, asomándose sobre Ultima Thule, los siete instrumentos de ciencia de New Horizons vieron su congelada superficie en exquisito detalle. Según Hal Weaver, del Laboratorio de Física Aplicada de Johns Hopkins en Maryland –el centro nervioso de ciencia de la misión– las cámaras ayudarán a entender mejor el color rojizo de la gran roca. “Ese bronceado es culpa de la radiación ultravioleta del Sol y de los rayos cósmicos, que han formado una variedad de compuestos orgánicos sobre la piel del objeto, en combinación con el nitrógeno”, explica.

Un par de días después, fueron recibidas las primeras fotografías de New Horizons hechas a Ultima Thule, dejando ver que se trata de dos cuerpos unidos que lucen como un "muñeco de nieve".


Imagen de Ultima Thule, donde se puede apreciar su tamaño.

Ultima Thule surgió a partir de nubes de partículas heladas que comenzaron a juntarse. En algún momento llegaron a formarse dos grandes cuerpos que giraron en espiral hasta tocarse lentamente, con lo cual crearon esa mole en forma de muñeco de nieve.


Imagen de Ultima Thule con una representación gráfica que muestra su desplazamiento y rotación.

El "cuerpo" del muñeco es Ultima y es tres veces más grande que la "cabeza", que es Thule. En total, mide cerca de 33 kilómetros de largo, aproximadamente el tamaño de Washington D.C.
Los nuevos datos enviados por la sonda también muestran que Ultima Thule es de color rojizo y muy oscuro. Sus áreas más brillantes reflejan solo el 13% de la luz que recibe, mientras las más oscuras reflejan sólo el 3%.


LA EVOLUCIÓN DE LA MISIÓN



En el 2014, cuando se escogió a Ultima Thule como objetivo, la roca existía como un punto de luz en el espacio (miles de veces más opaco que Plutón) y durante años esa fue la realidad del equipo de científicos. Pero ahora ven algo sólido, algo con tres dimensiones y con personalidad. ¿Y qué hay con ese collar luminoso? Es emocionante y es un poco aterrador. 

De ser una misión de ciencias planetarias, New Horizons está evolucionando a ser una de astrofísica y física del Sol. Está trabajando en hacer un perfil de las partículas de altas energías despedidas por el Sol, así como la distribución del polvo interplanetario, gracias a un contador de granos que lleva en el lomo.

A pesar de tener 13 años de edad, y de haber atravesado millones de kilómetros de espacio, el robot está en buena forma. Sus baterías le durarán otros 20 años, durante los cuales navegará por Kuiper. Pero la Nube de Oort, la más lejana y vasta puerta de salida de nuestro sistema solar estará fuera del alcance del intrépido explorador espacial.

“Hace una generación ni siquiera sabíamos que existía este cinturón de cometas. Era solo una teoría”, dice Alan Stern sin ocultar la emoción. “Ahora estamos sumergidos en él. Vamos a sorprendernos, y esa es la mejor parte de la exploración”.



Sonda New Horizons.


La sonda, que viaja a una velocidad aproximada de 54.000 kilómetros por hora, continuará descargando imágenes y otros datos durante los próximos meses, y se espera que todos los datos se devuelvan a la Tierra dentro de los 20 meses utilizando el transmisor de 15 vatios de la sonda.  A su vez, una cámara infrarroja buscará hielos exóticos de monóxido de carbono, nitrógeno y amoníaco, y otros instrumentos querrán saber si Ultima actúa como un cometa que bota gas atrapado entre el hielo. 

Tampoco es fácil tratar de mantener ilesa una nave espacial que navega a enormes velocidades por una región que literalmente es un campo minado. “Si lo golpea algo del tamaño de un grano de arroz, se acabó todo”, explica Alan Stern, el investigador principal de New Horizons, y autor del libro ‘Persiguiendo a Nuevos Horizontes’, sobre la exploración de Plutón. “Tenemos un equipo de 12 astrónomos planetarios constantemente mirando las imágenes de las cámaras telescópicas buscando cualquier cosa que pueda representar un peligro para la nave”.



Alan Stern, investigador principal de la misión New Horizons.


"Todo lo que vamos a aprender sobre Ultima Thule, -su composición y su geología, cómo se ensamblaron originalmente, si tiene satélites y una atmósfera, y ese tipo de cosas-, nos enseñará acerca de las condiciones en las que se formó el Sistema Solar, algo que no nos han mostrado otros objetos a los que hemos sobrevolado o en los que hemos aterrizado, porque son muy grandes, muy evolucionados o muy cálidos. Ultima Thule es único", dijo Alan Stern, investigador principal de New Horizons. «Se trata de la primera exploración de un objeto pequeño del cinturón de Kuiper y la investigación más lejana de cualquier mundo, por lo que ya se ha hecho historia. Pero casi todo el análisis de datos se dará en el futuro. Nuestro equipo está impaciente por comenzar a excavar en todo este tesoro».


Fotografía a color de Ultima Thule.

A pesar de toda esta información, aún falta casi año y medio (exactamente 20 meses, según calculan los científicos) para que lleguen a la Tierra todos los datos recabados por New Horizons. De hecho, la transmisión desde la sonda se detuvo durante una semana -hasta el 10 de enero-, ya que la radiación solar no permitía emitir información desde la nave.

Luego de esto pasarán varios años hasta que se procese y se materialice en forma de estudios científicos. Así que recuerden el nombre de Ultima Thule, porque dará mucho que hablar en la próxima década.





Referencias: