Un equipo de científicos de la NASA ha detectado hidrógeno
y dióxido de carbono en los géiseres que emanan desde el interior de Encélado.
El sobrevuelo de la sonda Cassini alrededor de esta luna de Saturno se realizó
a finales de 2015 e hizo posible el hallazgo, que se publicó el pasado 13 de
abril en la revista Science.
Los resultados publicados suponen una nueva evidencia
sobre la habitabilidad de Encélado. Este concepto se refiere a las condiciones
necesarias para que un planeta o un satélite puedan ser habitables, pero no
significa que los investigadores hayan encontrado vida por el momento.
Encélado es un satélite de Saturno que apenas mide 500
kilómetros de diámetro. Está cubierto por una corteza helada, de unos 30 o 40
kilómetros de grosor, y su superficie es tan tranquila como fría. Sin embargo,
su interior parece ser muy activo. En 2005 la NASA descubrió que en el
hemisferio sur de este mundo hay una nube de hielo que se forma a causa de la
presencia de varios géiseres que expulsan materiales desde las “tripas” de
Encélado, como si alguien hubiera descorchado una botella de champán.
Los estudios posteriores convirtieron a esta esfera de
hielo en un firme candidato a albergar vida extraterrestre. Gracias a Cassini,
los científicos averiguaron que bajo el hielo Encélado se esconde un mundo
subterráneo habitado por un núcleo rocoso rodeado por un océano global. Se
descubrió que en el agua hay moléculas orgánicas y amoníaco en disolución,
porque estos salen al exterior a través de los géiseres. También se concluyó
que la potente gravedad de Saturno genera calor en las entrañas del satélite,
aportando otro ingrediente clave para la aparición de la vida.
EL HALLAZGO
Los científicos de la misión Cassini no han detectado
directamente las fuentes de energía internas de Encélado. Han deducido su
existencia de manera indirecta a partir del material que la luna de Saturno
envía al espacio por los géiseres de su polo sur.
La nave pasó a través de este material el 28 de octubre
del 2015 para analizar su composición. “El penacho de material contiene los
rastros químicos de la interacción entre el agua y la roca que se produce en el
fondo del océano”, escriben los investigadores en Science .
En el pasado, los científicos de la misión Cassini
también hallaron un gran océano bajo la superficie helada de esta luna de
Saturno. Estas investigaciones convierten a Encélado en uno de los mejores
candidatos para la búsqueda de vida extraterrestre en el sistema solar.
Durante una de sus inmersiones más profundas, la sonda
espacial exploró los géiseres que emanan de las grietas situadas en la región
polar sur de Encélado. Tras analizar los datos obtenidos, el equipo de Hunter
Waiter, primer autor del estudio e investigador del "Soutwest Research
Institute" (SwRI) (Estados Unidos), en la misión Cassini, determinó que había
hidrógeno y, en menor medida, dióxido de carbono en el vapor que salía de esas
regiones del satélite.
COMPUESTOS ORGÁNICOS
Cassini, una misión liderada por la NASA que ha cambiado
la visión de Saturno y sus lunas, ha visitado Encélado en 21 ocasiones desde el
2005. Cuando se inició la misión, se esperaba que la luna más interesante del
sistema planetario fuera Titán. Con un tamaño suficiente para retener una
atmósfera, Titán parecía el único satélite de Saturno capaz de sustentar reacciones
químicas con moléculas orgánicas –las moléculas en las que se basa la química
de la vida-. De ahí que Cassini transportara hasta Titán la sonda Huygens de la
Agencia Espacial Europea, que encontró un mundo oscuro, siempre envuelto en
nubes, con lagos de hidrocarburos a los que no llega la luz del sol, pero donde
tal vez no sea imposible la vida.
Sin embargo, Encélado le ha robado el protagonismo a
Titán y hasta a Saturno. La pequeña luna se ha convertido en la joya de la
misión, la que ha ofrecido los descubrimientos más inesperados y estimulantes.
“Esta luna captó el máximo interés desde que se observaron los géiseres de
vapor de agua que salían de su superficie”, explica Kike Herrero, astrofísico
del Institut de Ciències de l’Espai (IEEC-CSIC) y de Celístia Pirineus.
Cassini ha pasado a través de estos géiseres en ocho
ocasiones a lo largo de once años para analizar cómo son y deducir cómo es el
interior de Encélado. En su última visita al satélite, la nave pasó a sólo 49
kilómetros de la superficie, más cerca que en cualquier visita anterior, y
sobrevoló las llamadas rayas de tigre del sur del satélite.
Fue una visita fugaz. A la velocidad a la que vuela
Cassini, de 8,5 kilómetros por segundo respecto a la superficie de Encélado,
dispuso de pocos segundos para recoger datos. Los instrumentos de la nave se
habían configurado para priorizar el análisis del material emitido por los
géiseres, prestando especial atención a las moléculas de hidrógeno –formadas
por dos átomos-, que en la Tierra se producen en las fuentes hidrotermales por
la interacción del agua con las rocas.
Tal como se esperaba, el material de los géiseres está
compuesto mayoritariamente por agua, que representa entre un 96% y un 99% de
las moléculas emitidas. Según los resultados presentados en Science, también
contiene pequeñas cantidades de dióxido de carbono (entre 0,3% y 0,8%), metano
(0,1%-0,3%), amoníaco (0,4%-1,3%) y –el resultado más importante– hidrógeno
molecular (0,4%-1,4%).
“El hallazgo de hidrógeno molecular reaviva aún más el
interés por Encélado como escenario para la posible presencia de vida porque es
uno de los ingredientes que utilizan para obtener energía los microorganismos
que viven en la Tierra en las profundidades de los océanos, donde no llega la
luz del sol”, destaca el astrofísico Kike Herrero.
Tras analizar distintas hipótesis para explicar el origen
del hidrógeno, los investigadores de la misión Cassini concluyen que tiene que
proceder de la interacción entre el agua y las rocas en el fondo del océano de
Encélado.
LA VIDA COMPUESTA DE HIDRÓGENO
Donde la luz del Sol no llega, como en las profundidades
de los océanos de la Tierra, el hidrógeno molecular y el dióxido de carbono son
una fuente de energía para algunos microbios. Estas moléculas son producidas en
buena parte por las reacciones que ocurren de forma natural entre el hierro de
los minerales del suelo y el agua. Además, son aprovechadas por algunos seres
vivos como una especie de “fertilizante”.
Según Ricardo Amils, catedrático de Microbiología en la
Universidad Autónoma de Madrid, en la Tierra estas moléculas son usadas por
unos microbios que se conocen como arqueas metanógenas (un tipo de oganismo
similar a bacterias que producen gas metano).
"Tanto la metanogénesis (generación de metano) como el
hidrógeno y el dióxido de carbono son primitivos y primordiales", ha explicado
Amils. De hecho, unos y otros parecen ser algunos de los protagonistas que
permitieron la aparición de la vida en la Tierra hace miles de millones de
años.
¿Quiere decir esto que en Encélado también ha aparecido
vida especializada en consumir ese hidrógeno y ese dióxido de carbono? Aún no
se sabe. “No podemos concluir que Encélado alberga seres vivos, y es difícil
hacer predicciones porque no sabemos si el origen de la vida es inevitable o
algo que ocurre una vez en el Universo”, ha dicho Hunter Waite. “¡Esto es
precisamente lo que nos motiva a explorar más!”.
Este investigador ha reconocido que en Encélado no todo
es favorable para la vida. Por ejemplo, aún no se ha detectado la presencia de
azufre y fósforo, dos elementos fundamentales para los organismos, puesto que
forman una parte muy importante de las proteínas y del material genético de los
seres vivos.
Ricardo Amils ha aclarado también que si en Encélado
hubiera microbios consumiendo hidrógeno molecular y dióxido de carbono, deberían
estar produciendo metano. “La existencia de un desequilibrio químico como el
medido no implica que haya vida, sino que puede haberla porque conocemos seres
vivos en la Tierra que lo utilizan para obtener energía. Faltaría detectar el
producto: el metano, y demostrar que es biológico, porque la geología también
puede originarlo”.
Las últimas observaciones de Cassini en Encélado
“representan un avance importante para evaluar la habitabilidad del satélite”,
sostiene Jeffrey Sewald, geoquímico de la Institución Oceanográfica de Woods
Hole en Massachusetts (EE.UU.) que no ha participado en la investigación, en un
artículo de opinión publicado en Science . Pero “sigue habiendo muchas
preguntas abiertas”, advierte.
“Este estudio aporta la evidencia más sólida de un
procesamiento hidrotermal de las rocas por parte del agua líquida en el
interior de Encélado”, ha explicado Waite. “Nuestro trabajo también muestra que
este océano es energéticamente habitable, lo que quiere decir que tiene la
suficiente energía química como para soportar vida similar a algunos microbios
que hay en la Tierra”.
Las respuestas a estas preguntas tardarán en llegar. La
nave Cassini, que este año concluye su misión, ya no regresará a Encélado para
estudiar sus géiseres ni explorar su interior.
“Necesitaremos una próxima misión para responder a las
preguntas astrobiológicas que ha despertado esta investigación. Una misión
llamada "Enceladus Life Finder" (ELF) está bajo estudio, pero aún
está compitiendo por conseguir su oportunidad para volar», ha dicho Waite.
¿Cuáles serían las implicaciones de detectar vida en esta
pequeña y remota luna de Saturno? “Si la vida está presente en Encélado, esto
cambiaría para siempre la comprensión de cuál es lugar que ocupa la Humanidad
en el Universo. Este estudio no da ese paso, pero nos acerca un poco más hacia
el objetivo de entender la habitabilidad del increíble medio ambiente de este
lugar”, concluye Waite.
Kelly Miller, uno de los coautores del estudio, ha
recordado que la búsqueda de vida más allá de la Tierra debe ser humilde. El
motivo es que no se puede olvidar que es muy posible que las potenciales formas
de vida de Encélado no tuvieran nada que ver con las terrestres. ¿Cómo saber lo
que necesitan, en ese caso?
Las misiones de las próximas décadas prometen ser
apasionantes en la búsqueda de vida extraterrestre, y principalmente, en
Encélado.
Fuentes:
-Abc.es
-Lavanguardia.com
-Hipertextual.com
Fuentes:
-Abc.es
-Lavanguardia.com
-Hipertextual.com